La agencia de noticias Business News Americas informó que Freeport-McMoRan Copper & Gold aumentó de US$4.000mn a US$4.400mn el costo de capital estimado para el programa de ampliación que se llevará a cabo en la operación cuprífera Cerro Verde en Perú, indicó la compañía estadounidense en una teleconferencia para abordar los resultados del tercer trimestre.

La medida obedece principalmente a los crecientes costos de inversión ligados a instalaciones energéticas y proyectos de agua.

En cuanto a la variación futura de los requisitos de costos para el proyecto, la nueva cifra es un cálculo bien fundado, sostuvo el presidente de Freeport-McMoRan para América, Red Conger.
 
“Ahora tenemos un cálculo en función del 30% de avance que registra la ingeniería, lo que nos otorga una base sólida para esa nueva proyección”, explicó.

“Gran parte de esta situación es muy similar en naturaleza a lo que ya hemos hecho”, sostuvo el presidente y gerente general de la minera, Richard Adkerson, en alusión a trabajos anteriores de ampliación ejecutados en la mina. “Los grandes problemas, como ocurre en el norte de Chile y sur de Perú, es el agua y la energía. En esos casos hemos observado cierto agravamiento, pero parte de nuestra inversión nos otorga una garantía sobre estos temas”, agregó.
 
Si bien las leyes minerales en Cerro Verde, emplazada en la Región Arequipa, no son tan altas como en otras operaciones donde se han construido grandes plantas, Conger sostuvo que entre los puntos a favor de ella figuran una remoción de material estéril con una proporción relativamente baja y la disponibilidad de hidroelectricidad.
 
“Lo que nos ha entusiasmado de Cerro Verde es la proporción baja de remoción de material estéril comparado con muchas otras minas de alta ley del mundo; además disponemos de hidroelectricidad en esa parte del planeta, lo que forma parte de nuestro plan. Esos son dos grandes factores paliativos favorables para nosotros”, detalló el ejecutivo.

Adkerson destacó que la ampliación de Cerro Verde se enmarca dentro de la estrategia de la empresa en base a su portafolio a fin de que Freeport puede seguir aportando grandes volúmenes de cobre junto con mantener la capacidad de adaptarse.

“Deseamos que todas las minas pudieran ser como Grasberg, pero eso no es posible”, indicó Adkerson con respecto a la mina que tiene la empresa en Indonesia. “Cada vez más se deben considerar depósitos como el de Cerro Verde para suministrar cobre y con proyectos greenfield con la ley que tiene esta operación se presenta un gran desafío”.

“Por ende, esta inversión nos entrega la oportunidad de seguir adelante con estos considerables recursos, lograr ofrecerlos al mercado y, si nuestro panorama es el mismo que en el 2008 y el 2009 -donde el mundo nos jugó en contra-, tenemos organizado nuestro negocio, de forma tal que nos podemos ajustar”, añadió.
 
El proyecto registrará un retorno de 10% tras impuestos con un precio de equilibrio para el cobre cercano a US$2,80/lb o US$2,85/lb, indicó su gerenta de finanzas, Kathleen Quirk.

La ampliación de Cerro Verde aumentará el ritmo de procesamiento de 120.000t/d a 360.000t/d. La tasa de extracción pasará de 320.000t/d a 850.000t/d. Como resultado, la producción de cobre subirá en 600 millones de libras anuales (Mlb/a, 272.155t) y la de molibdeno en 15Mlb/a para llegar a unos 1.000Mlb/a de cobre y 25Mlb/a de molibdeno. Las reservas de cobre a fines del 2011 se situaban en 30.200Mlb.

Freeport controla el 53,7% de Cerro Verde. SMM Cerro Verde Netherlands posee un 21%, el productor local de metales preciosos Buenaventura (NYSE: BVN) cuenta con un 19,3% y el resto está en manos de varios accionistas.