Por Oscar Martínez Bruna

La minera brasileña Samarco deberá pagar una multa de a lo menos 1.000 millones de reales (unos 260 millones de dólares) por los daños ambientales causados por el colapso de dos de sus embalses con desechos mineros. El accidente dejó, hasta donde se tiene información, un saldo de diez fallecidos, decenas de desaparecidos y el pueblo Brasileño de bento Ridrigues, ubicado en el Estado de Minas Gerais, enterrado por toneladas de lodo y desechos de mineral de hierro contenidos en los embalses que cedieron.

La justicia ya había bloqueado 78 millones de dólares de Samarco, propiedad de la brasileña Vale y la anglo-australiana BHP Billiton, para pagar por los daños de esa tragedia ocurrida hace 11 días, considerada una de las peores catástrofes medioambientales de la historia de Brasil. Cálculos realizados por el Deutsche Bank han determinado que los daños totales superan los 1.000 millones de dólares. La riada contaminó asimismo 500 km del río Doce en Minas Gerais y su vecino Espirito Santo (sureste), y expertos prevén que enfrentar los daños de este desastre llevará hasta 100 años.

A raíz de lo anterior, Vale y BHP Billiton, Samarco firmaron un compromiso preliminar para garantizar el financiamiento de una serie de medidas de emergencia orientadas a evitar, mitigar, remediar y compensar a la comunidad por los daños causado. Además de trabajar en la forma de abordar el conflicto ambiental y social que ha surgido a partir de los efectos del colapso de los tranques de su propiedad.

A la luz de los acontecimientos y en vista de las nefastas consecuencias de este lamentable incidente que ha costado vidas humanas, ha causado significativos daños materiales, y ha puesto a Samarco en el ojo del huracán, es extremadamente importante enfatizar la importancia de contar con un sistema de monitoreo y control de calidad orientado a asegurar un correcto diseño e implementación de tranques de relave en la minería. Es necesario considerar una serie de factores, y no solamente aspectos relacionados con el costo de hacer un buen negocio. Las consecuencias de un mal diseño de tranques de relave podrían derivar en un serio problema de seguridad y responsabilidad ambiental, como ya ha quedado de manifiesto en Brasil.

Antes de ser conocida como Vale, la compañía se llamaba Companhia Vale do Rio Doce (CVRD); o sea, la compañía que surgió del Valle del Río Dulce.

La extracción de mineral de hierro ha jugado, y seguirá jugando, un papel muy importante en el legado de la compañía, y posiblemente sea este legado el que sirva de inspiración para que la empresa revise, rediseñe y busque la mejor forma de hacer bien las cosas, con pleno respeto a las personas y al medioambiente.

Sinceramente,
Oscar Martínez Bruna
Editor en América Latina,
omartinez@mining-media.com