Las primeras 81 toneladas métricas finas (TMF) de plomo en lingotes producidas en la Empresa Metalúrgica Karachipampa (EMK) fueron exportadas a Perú por el puerto de Arica, Chile. La información corresponde al gerente general de la EMK, Eddy Téllez Arandia, quien explicó a La Razón que por la venta de las 81 TMF esa empresa estatal recibirá aproximadamente $us 146.000, pero que a ese monto se le debe reducir gastos de administración.

“Ése es el precio bruto, de eso hay que diferenciar gastos de administración y eso llega aproximadamente a unos $us 3.500, o sea vamos a recibir unos $us 143.000, pues hay gastos que se deben reducir de ese monto bruto”, dijo.

En cuanto a otros mercados, señaló que países como Estados Unidos, China y Brasil están interesados en los lingotes, pero que la comercialización debe pasar por una licitación pública. Las 81 TMF fueron producidas hace 30 días, sostuvo. Añadió que a mediados de abril saldrá otro lote de 100 TMF de plomo.

Calidad. Los lingotes de plomo producidos en la EMK tienen una pureza del 99,97% y los lingotes de plata tienen 99,95%. Con esa calidad ambos son exportables. El complejo está ubicado a tres kilómetros de la ciudad de Potosí. “Nosotros, al horno Kivcet, le alimentamos con concentrados de plomo y plata que viene de la Minera San Cristóbal (MSC), en esos concentrados el plomo está en un 60% de ley y de ese proceso se obtiene un plomo metálico impuro que pasa a la refinación térmica y en esa etapa se consigue el plomo refinado en lingotes”, detalló ayer el gerente general.

El 10 de septiembre de 2014, los primeros lingotes de plomo producidos en esa planta fueron entregados al presidente Evo Morales y otras autoridades en un acto especial en instalaciones de ese complejo que estuvo paralizado desde la conclusión de su construcción hace 30 años, en 1984.

Datos del Ministerio de Minería y Metalurgia, difundidos a los periodistas en la visita a la metalúrgica, indicaban que la construcción de la planta comenzó en 1979 y terminó en 1984, y se intentó empezar operaciones en 1985. Pero la relocalización hizo que la planta no arranque, por lo que nunca inició operaciones hasta el 15 de julio de 2014.

En esa oportunidad, el presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Marcelino Quispe, anunció que este tipo de plantas tienen una vida útil de entre 10 y 15 años, pero dependen de su estructura por lo que irán delineando este aspecto a medida que vayan trabajando en el complejo. “No se olviden que esta planta ha sido paralizada hace 30 años, no se olviden que nuestros accesorios se han venido deteriorando y lo hemos ido cambiando y justamente no ha sido un trabajo fácil”, dijo el titular de la Comibol.

La capacidad de producción del complejo es de 51.000 toneladas de plomo y plata al año. Quispe adelantó que de modo inicial se prevé alcanzar en los próximos seis meses el 80% de esa meta. La capacidad de tratamiento en esta planta es de 7 toneladas por hora de concentrados de plomo y plata, pero en la actualidad están trabajando con 5 toneladas por hora, acotó Quispe.

Los recursos provenientes por la producción de lingotes de plomo en la EMK cubrirán los costos de operación del complejo y con los lingotes de plata se generará utilidades para esa firma dependiente de la Comibol, informó el ministro de Minería y Metalurgia, César Navarro, el día que se entregó los lingotes al Jefe del Estado.

Navarro añadió que al fundir otros metales la planta puede ser denominada “polimetalúrgica”. El gerente general de la EMK indicó a La Razón que aún tienen concentrados de plomo y plata para unos cuatro meses más, pero que la Minera San Cristóbal (MSC) les garantizó otras cantidades.