Fundación Chile, con el financiamiento del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) de la Región de Arica y Parinacota, impulsó un proyecto para desarrollar tecnología que actualmente se encuentra en proceso de patentamiento para optimizar los recursos en el proceso de la lixiviación del cobre y con ello, aumentar la productividad del proceso.

El proyecto piloteó el desarrollo de cobertores térmicos para piscinas de cobre que permiten la estabilidad de la temperatura y evitan así la evaporación del agua, por lo que se reduce el consumo de combustible en el proceso. Además, la tecnología captura la energía solar debido a la transmitancia del cobertor y la incorpora en el sistema, logrando un mayor aprovechamiento de la energía. Así, se consigue un aumento de temperatura de las soluciones de hasta 2 °C lo que se traduce en un ahorro de un 80 por ciento de agua y de hasta un 15 de combustibles fósiles.

Como afirma Fundación Chile, en un principio, el proyecto identificó las oportunidades de eficiencia energética a través de un mapa de su demanda para luego desarrollar la tecnología y un modelo matemático.

La iniciativa tuvo una duración de dos años y contó con el apoyo de la de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami).