División Ministro Hales logró mover 228 millones de toneladas de material estéril, en plazo y con costos competitivos, altos estándares socio-ambientales e índices de seguridad impecables. El 4 de abril de 2011 salió el primer camión con carga y hace muy poco se realizó la última carga de 350 toneladas, dando por finalizado el prestripping.
Luego de 28 meses, Codelco finalizó el prestripping más grande de la historia minera mundiial, luego de haber removido 228 millones de toneladas de material esteril, lo que equivale a 70 cerros Santa Lucía. La División cumplió el compromiso de realizar todas sus actividades del prestripping con pleno respeto a su entorno, con índices de seguridad impecables, y en plazos y costos competitivos de la industria.
Trabajadores de la División, representantes de la comunidad y empresas colaboradoras fueron testigos de la carga del camión con las últimas 350 toneladas de estéril, que sumaron un total de 228 millones de toneladas removidas del prestripping.
El desafío impuesto a Ministro Hales, la más joven División de Codelco, creada en septiembre de 2010, era llevar adelante un prestripping sustentable, con los altos estándares de la empresa y tomando en cuenta que la División se localiza a 5 kilómetros de Calama. “Este es el prestripping sustentable más grande de la historia. Nos sentimos muy orgullosos de haber comenzado en esta pampa, donde no había nada y hoy día podemos decir con mucho orgullo que hemos finalizado el primer hito de este proyecto estructural, el más grande de Codelco”, señaló Claudio Olguín, gerente general de Ministro Hales. Añadió que “la División, junto con todo Codelco, estamos muy orgullosos de los objetivos cumplidos según lo planificado. Estamos satisfechos por lo conseguido, ya que esto demuestra el carácter y la cultura que tienen los trabajadores de Ministro Hales. Hoy estamos haciendo historia y eso debe ser reconocido”.
Por su parte, Francisco Balsebre, gerente Mina de División Ministro Hales, señaló que el prestripping se terminó una etapa de 28 meses de trabajo y con excelentes índices en el cumplimiento de las metas propuestas. “En primer lugar sin ningún accidente que lamentar, que para nosotros es lo más valioso; luego terminamos a tiempo y en presupuesto. Hemos dejado una cultura y una forma de hacer las cosas nuestra y que va a quedar por mucho tiempo. Así que la felicidad es inmensa esto significa mucho, y a la vez se inicia un nuevo desafío ya que el proyecto recién comienza. Estamos a las puertas de que nos entreguen la planta y que empecemos a producir cobre, que es nuestro negocio”.