“La ecuación económica no cierra y hasta ahora no nos habían escuchado”, dijo un profesional vinculado a Troy Resources en los pasillos de la Subsecretaría de Trabajo, donde la propietaria de la mina Casposo presentó un Procedimiento Preventivo de Crisis.

De las tres minas que explotan metales a escala industrial en San Juan, Casposo es la más chica y la que más está sufriendo el impacto de los precios en baja del oro, plata y cobre, producto de la crisis internacional.

Casposo se inició en el 2009 como mina de plata y oro Argentina, pero hoy su lingote es 99 % plata, cuya onza hoy está en los 14 dólares, “es imposible de sostener con estos precios. La empresa presentó el procedimiento de crisis porque no cierran los números”.

La agencia Reuters difundía esta semana que los precios de los metales cerraron en su nivel más bajo en seis años. Los metales preciosos siguieron la tendencia bajista del oro, la plata acumuló 14 semanas de pérdidas y tocó su menor nivel en dos años y medio, para quedar en 14.08 dólares la onza.

La empresa presentó en la mesa de negociaciones de la Subsecretaría estos y otros números para justificar su pedido de crisis. En el primer encuentro la postura fue drástica y querían despedir a 300 empleados.

Inmediatamente después corrieron las versiones de su venta, algo que fue desmentido desde la empresa. “No se quiere vender, lo que estamos buscando es un socio inversor, alguien que acompañe financieramente”, dijo la fuente.

El panorama no sorprende. A principios de año se comenzaba hablar de cómo la crisis de los metales sumado a las medidas nacionales en el sector minero, terminarían tocando a las explotaciones locales. En agosto pasado, Tiempo de San Juan publicaba que las tres explotaciones mineras ya estaban afectadas por el precio de los metales, advirtiendo también que las más grandes soportarían mejor que las chicas.